La logística verde o «green logistics» se ha convertido en una tendencia en la cadena de suministro en los últimos años, no solo para reducir el impacto en el medio ambiente de las operaciones, sino también, como una manera de ganar una mayor lealtad de los clientes que prefieren comprar a las empresas que demuestran un compromiso con la sostenibilidad.
La prueba está en el sentimiento de los consumidores. Una encuesta realizada en 2021 en el Reino Unido, por ejemplo, mostró que dos tercios de los encuestados prefieren comprar productos de marcas y minoristas que se ocupan activamente de la protección del medio ambiente.
Cada vez más empresas incorporan estrategias de logística verde para reducir su huella de carbono y hacer más sostenibles sus operaciones. Entre ellas se encuentra el uso de tecnología avanzada para hacer un seguimiento del rendimiento de los vehículos, gestionar el consumo de combustible u optimizar las cargas transportadas en los camiones.
Actividades logísticas con menor impacto
La logística tradicional se centra en ir del punto A al punto B de la forma más eficiente posible. Si bien esto por sí solo puede resolver algunos problemas medioambientales evitando, por ejemplo, el despilfarro de combustible, la logística verde va un paso (o dos o tres) más allá.
La logística verde se centra en la protección del medio ambiente y la conservación de los recursos. Es un concepto que se ha impuesto en todo el mundo.
Por ejemplo, el Daily Star de Bangladesh publicó recientemente un artículo de opinión en el que se afirmaba que, si bien el gobierno puede establecer la política medioambiental, «los fabricantes y usuarios de transporte también deben desempeñar un papel importante en la reducción de las emisiones de carbono y hacer del transporte un negocio respetuoso con el medio ambiente para hacer funcionar la rueda de la economía global».
La logística verde exige un enfoque holístico en lugar de centrarse en una parte de la operación. Las soluciones para cada empresa giran en torno a su tipo de operaciones logísticas. Pero la idea es hacer cambios en toda la operación, creando una cultura empresarial de sostenibilidad.
La logística verde con ejemplos
Empresas han tomado sus propias medidas para que sus operaciones logísticas sean más sostenibles. Estas medidas incluyen la construcción de más centros de reparación en todo el país, reduciendo los kilómetros que los vehículos tienen que recorrer para las reparaciones y el mantenimiento. Otras han comprado vehículos híbridos para sustituir los vehículos de la flota que funcionan con gasolina.
Los sistemas automatizados que optimizan las rutas de entrega también reducen el consumo de combustible, disminuyendo el impacto de la flota en el medio ambiente. Al hacer de la sostenibilidad una prioridad, las empresas reducen el tiempo, el combustible y los kilómetros empleados en las entregas. Esta eficiencia también mejora las posibilidades de que los conductores realicen todas las paradas a tiempo.
Al poner en marcha soluciones logísticas ecológicas, las flotas pueden reducir su impacto medioambiental y aumentar su base de clientes fieles. Es un movimiento inteligente que beneficia tanto al planeta como al futuro de la empresa.
En Grupo Mardaras, estamos comprometidos con la sostenibilidad, no solo desde el punto de vista del cuidado del medio ambiente, sino por la mejora del bienestar de nuestro equipo y el valor añadido para nuestros clientes. Por ello, seguimos trabajando en nuevas formas de hacer las cosas en sintonía con la sostenibilidad.